¿Para qué sirve el té?

Por Andrea Ramos. 
Una de las preguntas que más nos hacen es para qué sirven los tés. ¿Cuál es el té que ayuda a adelgazar? ¿el té verde ayuda a curar el cáncer? ¿tomar té blanco me mantendrá más joven? ¿cuál té me va a ayudar a dormir? Estas son algunas de las dudas que las personas tienen alrededor del té y hoy vamos a contestarlas todas de una u otra manera.
 

Primero, es importante recordar a qué nos referimos cuando decimos “té”. El té 
es la planta Camellia Sinensis que ha sido sometida a condiciones específicas de calor y humedad para procesarla. En total existen seis categorías de té: blanco, verde, amarillo, wulong, rojo y oscuro; las cuales se determinan a partir de su procesamiento. No importa la categoría a la que pertenezca, todos los tés tienen cafeína y todos provienen de la misma planta.

 

¿Qué pasa, entonces, con el té de canela, orégano, lavanda, etc.?

Pasa que no son tés, sino tisanas y pertenecen a un mundo diferente. Es importante hacer la distinción entre té y tisana, no para andar por la vida corrigiendo a todo el mundo diciendo: “en realidad, la manzanilla no es un té”, sino porque hay características distintas entre estas tisanas y el té que deben tomarse en cuenta al momento de recomendar alguna infusión. Por ejemplo, ya mencionamos que todo el té tiene cafeína, lo cual se traduce en que ninguno nos ayudará a conciliar el sueño fácilmente, pero la gran mayoría de las tisanas no contiene cafeína, por lo que pueden ser una buena alternativa para consumir antes de ir a la cama.

 

Otra diferencia importante entre el té y las tisanas es que a estas últimas, sobre
todo a las herbales, se les suelen atribuir una serie de beneficios que el té no
tiene. Hay muchas personas que históricamente han estudiado el uso de las
plantas con fines medicinales, pero en el caso del té no existen estudios
concluyentes que indiquen que el consumo de las infusiones de algún té tenga
beneficios para la salud como la reducción de grasa corporal o la desaparición del cáncer. Cualquier beneficio adjudicado al consumo del té es meramente hipotético y suele ser una estrategia de marketing.

 

Pero si no nos va a ayudar a dormir y no tiene propiedades medicinales, ¿para
qué sirve el té? Está comprobadísimo que el té tiene cafeína, por lo que podemos incluirlo en nuestras rutinas de las mañanas para llenarnos de energía y empezar el día, pero más allá de eso el té sirve para muy poco. ¿Es esto una mala noticia?
¡Para nada! El té tiene muchísimos sabores, aromas y texturas para que tomarlo
sea una gran experiencia que no está ligada con la utilidad. Si no nos crees aquí
te dejamos tres razones para tomar té aunque “no sirva para nada”.

 

• Porque sus sabores son tan diversos que seguro encontrarás uno perfecto para ti.

Cada una de las seis categorías tiene un sabor particular que la distingue del

resto, pero incluso dentro de la misma categoría los sabores, aromas y texturas
son muy variados. Dependiendo del protocolo de cosecha, el procesamiento, su
lugar de origen y hasta el año en que fue cosechado. También, la manera de
prepararlo, los ingredientes con los que se mezcla (o no) y con lo que decidas
acompañarlo pueden cambiar por completo la experiencia.
Aunque creas que no te gusta el té, seguramente encontrarás alguna variación
que disfrutes muchísimo.

 

• Porque tiene muchísimo potencial para crear bebidas deliciosas.

Aunque tomar un tecito calientito y en taza como la mayoría acostumbramos, esta no es la única manera de disfrutar del té. Desde el cold brew, las maceraciones con destilados y las limonadas, las posibilidades de mezclar, maridar y experimentar con el té son interminables. Si has probado el té pero no te gusta su sabor “solito” existen muchísimas alternativas para adaptarlo a tus sabores favoritos.

 

• Porque abre la puerta a conocer otras culturas.

 

México tiene una cultura muy antigua y rica alrededor de la herbolaria, la historia del té en México es bastante nueva; sin embargo, este no es el caso en muchísimos países del mundo. En lugares como Japón o Inglaterra el té está presente en su cultura desde hace varios cientos de años, pero en China o India el té ha estado en su historia desde hace MILES de años. Su presencia en tantos países y su historia tan larga hacen que en el mundo del té exista una variedad de tradiciones
amplísima que vale la pena descubrir, probar y disfrutar.

El té es mucho más que una bebida: es historia, es tradición, es experimentación y posibilidades para llevarlo a nuevos lugares. Abre las puertas y tu mente a esta
bebida milenaria y permite que construya tu camino contigo.